Dikt A mi nieta sofia
Qué bello y qué profundo es el soneto
«Pacto de Luz» que el reencarnar invoca.
Me estremece por dentro y por mi boca
Brota un ¡Ay! de suspiro y de respeto.
Profundo razonar que es como un reto
A discernir sin taladrar la roca,
Impenetrable del vivir que choca
Con el ciclo vital aún incompleto.
Irse del mundo a los parajes llanos
En donde el alma absorbe nuevos bríos,
Da brega igual a jóvenes o ancianos.
Ese regreso implica los sombríos
Y misteriosos pasos reptilianos
Que a nuestro corazón da escalofríos.
Reticencia a vivir de piel cubierto
Y luchar nuevamente como humano;
Afán de regresar al santo plano
Donde el alma es deveras ser despierto.
Olvidado el haber optado cierto
Por volver y luchar con diestra mano
Construyendo mejor el mundo sano
Que Dios nos ha entregado con acierto.
El paraiso material espera
La parte que aportar hemos jurado
Entregar con espíritu encarnado.
Pero el cuerpo domina en su quimera
De ambición y de falsa primavera
Que nubla la razón y la hace a un lado…
Dedicada a mi nieta Sofia en su nuevo nacimiento. Julio 2017