El autor César Vallejo

Me da miedo ese chorro, buen recuerdo, señor fuerte, implacable cruel dulzor. Me da miedo. Esta casa me da entero […]

Los mineros salieron de la mina remontando sus ruinas venideras, fajaron su salud con estampidos y, elaborando su función mental […]

Hay un lugar que yo me sé en este mundo, nada menos, adonde nunca llegaremos. Donde, aun si nuestro pie […]

Considerando en frío, imparcialmente, que el hombre es triste, tose y, sin embargo, se complace en su pecho colorado; que […]

Vierte el humo doméstico en la aurora su sabor a rastrojo; y canta, haciendo leña, la pastora un salvaje aleluya! […]

De todo esto yo soy el único que parte. De este banco me voy, de mis calzones, de mi gran […]

Zumba el tedio enfrascado bajo el momento improducido y caña. Pasa una paralela a ingrata línea quebrada de felicidad. Me […]

El encuentro con la amada tanto alguna vez, es un simple detalle, casi un programa hípico en violado, que de […]

Sé que hay una persona que me busca en su mano, día y noche, encontrándome, a cada minuto, en su […]

Forajido tormento, entra, sal por un mismo forado cuadrangular. Duda. El balance punza y punza hasta las cachas. A veces […]

Niños del mundo, si cae España – digo, es un decir- si cae del cielo abajo su antebrazo que asen, […]

Esta noche desciendo del caballo, ante la puerta de la casa, donde me despedí con el cantar del gallo. Está […]

Me moriré en París con aguacero, un día del cual tengo ya el recuerdo. Me moriré en París – y […]

Quién sabe se va a ti. No lo ocultes. Quién sabe madrugada. Acaríciale. No le digas nada. Está duro de […]

He conocido a una pobre muchacha a quien conduje hasta la escena. La madre, sus hermanas qué amables y también […]

La tarde cocinera se detiene ante la mesa donde tú comiste; y muerta de hambre tu memoria viene sin probar […]

Ciliado arrecife donde nací, según refieren cronicones y pliegos de labios familiares historiados en segunda gracia. Ciliado archipiélago, te desislas […]

Quién hace tanta bulla y ni deja testar las islas que van quedando. Un poco más de consideración en cuanto […]

Es de madera mi paciencia, sorda, vegetal. Día que has sido puro, niño, inútil, que naciste desnudo, las leguas de […]

El placer de sufrir, de odiar, me tiñe la garganta con plásticos venenos, mas la cerda que implanta su orden […]