Dikt Día de descanso en managua

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2. Descanso mis zapatos Descanso mis zapatos parado en el punto de partida. Aquí los cuatro vientos de tu nombre entrelazan manos reanudando las […]...
3. La virgen del descanso en la lactancia Cerrados, pues, los ojos sobre el mullido verde De la tierra – la virgen que ahora extiende Su pesado almohadón […]...
4. Justicia De la muerte se embanderan los verdugos. Los fúnebres bronces que abundan, graves, en plazas y museos y cuarteles. (Allí […]...
5. Fina garcÍa y vÍctor ordÓÑez Tendrías que haber permanecido allí entonces. El amor se hacía de pie como cuando éramos jóvenes y nada más sobreviviría […]...
6. Ensueños. tomado de dejaciones De mi boca emergen luces, Violines y truenos, El viento me desploma Se interna en mis brazos Me hace cielo […]...
7. Versos pá costeños Antes de morir yo quiero Dejar mis versos costeños. Estos son originales, Estos no tienen dueño. Son versos nacidos del […]...
8. Alondra Te encontré en un jardín lleno de flores Entre rosas, crisantemos y margaritas te vi, Ellas eran amarillas, rojas, y […]...
9. Mujeres Mujeres..Divinas todas ellas…!!! Que nos hacen enloquecer En dias nublados sin estrellas… Se encuentrán en varias formas Altas, bajitas, gueras […]...
10. V (diario de un mÁrtir) Con su voz infantil, voz deliciosa Que vibra en mis oídos todavía, Al llover de la nieve silenciosa Libros de […]...
11. Los poemas y las palabras Los poemas son cuerpos diminutos que emergen del universo de posibilidades Que son las palabras y nos colocan en los […]...
12. Los malos despertares Defiéndete de ellas. De esas noches que merecen los turbios homenajes de la literatura, y que tú ves brillar en […]...
13. Iv Hechicera hecha de luz De conchas y corales submarinos ¿Debo hacerme agua para sustraer cualquier substancia delatora? Penduleo Entre los […]...
14. Blues del cementerio Conozco un pueblo – no lo olvidaré- que tiene un cementerio demasiado grande. Hay en mi tierra un pueblo sin […]...
15. Al cruzar el portal Al cruzar el portal de la Ciudad Prohibida, recuerdo a mis amigos, los poetas de siempre. Y sobre todo a […]...
16. El cristo de temaca (iii) ¡Oh, mi roca!… ¡La que me pone con la mente inquieta, la que alumbró mis sueños de poeta, la que, […]...
17. Confesiones en el atrio Las mujeres son seres cotidianos que inventan el amor, tejiendo palabras, imágenes y mentiras, cuyo aroma en su piel es […]...
18. Con la flor del domingo Con la flor del domingo ensartada en el pelo, pasean en la alameda antigua. La ropa limpia, el baño reciente, […]...
19. Los orientales De todas partes vienen, sangre y coraje, para salvar su suelo los orientales; vienen de las cuchillas, con lanza y […]...
20. Final Mañana. Acaso el sol golpea en dos ventanas que entran en erupción. Antes salen los indios que pasan al mercado […]...
21. Salvación de la palabra (3) Allí estamos nosotros. Allí dentro del hálito. Tú que me lees estás allí con un libro en la mano. Y […]...
22. Pohema De berdad nunca importó tu mala ortografía Si supieras cuánta compañía me hacen tus palabras Aunque estén detenidas, aunque digan […]...
23. La aurora La aurora de Nueva York tiene cuatro columnas de cieno y un huracán de negras palomas que chapotean las aguas […]...
24. Sera será que es primavera Será el atardecer Será el calor de tus besos que me hace enloquecer Eterna primavera déjame […]...
25. Sale el sol Sale el sol. Salen los habitantes de sus casas. Hace frío. La plaza es ancha y sin casas. Los hombres […]...
26. Soneto ¡Cuántas veces te me has engalanado, clara y amiga noche! ¡Cuántas, llena de oscuridad y espanto, la serena mansedumbre del […]...
27. Bajo amenaza de vida Una mañana salí de mi tumba y grité «No escribiré otra línea jamás» Y las palabras saltaron de sus asientos […]...
28. Son tres los zopilotes Mira volar los zopilotes son horrendos Allí están en la cornisa del otro edificio Mientras sirvo el café las aves […]...
29. Ratas en el jardín Allí estaba entre ramas. Sigilosa. Oscura sobre el blanco de la cal. Luego, corriendo en la cornisa. Luego, el cerco […]...
30. Plenitud Pobre la boca del hombre. Sólo balbuceos de allí salen. Mínimas formas de aludir al Secreto. Al lento goteo de […]...
31. Promesas muertas Fue en una tarde de otoño, en el umbral de mi puerta, Dijiste que me querías, me pediste que te […]...
32. Nocturno A Manuel Machado Están todas También las que se encienden en las noches de moda Nace del cielo tanto humo […]...
33. Desde el sol El día menos pensado Nos encontraremos Haciendo el amor En el medio del sol. Nuestros cuerpos Serán feroces llamas Que […]...
34. A propósito de un bailarín Vamos, que no es un hombre como yo, Ni una mujer siquiera como tú; Es un mono vestido de tisú, […]...
35. Despertar español ¡Oh blanco muro de España! Federico García Lorca ¿Dónde estoy? Me despierto en mis palabras, Por entre las palabras que […]...
36. Versos a la tristeza de buenos aires Tristes calles derechas, agrisadas e iguales, por donde asoma, a veces, un pedazo de cielo, sus fachadas oscuras y el […]...
37. Algo sobre la muerte del mayor sabines (iv) Vamos a hablar del Príncipe Cáncer, Señor de los Pulmones, Varón de la Próstata, que se divierte arrojando dardos a […]...
38. Los amores cobardes Ah los amores cobardes Son como las Canciones finlandesas: deben tener su encanto. Amables instruidos a veces hasta conversan. Reciben […]...
39. Quema tu silueta Quema tu silueta ya borrosa entre las manos, como el agua que desaparece entre los dedos, residuos de una ceremonia […]...
40. La mujer más fuerte del mundo Para la mujer más fuerte del mundo. Las palabras de mi madre son tan seguras que muchas veces no quiero […]...