Dikt Los dos relojes
No importa el tiempo allá afuera,
la brisa en las uñas del limonero.
El azul tan vivo
que hiere la vista.
Siquiera el exceso de vida
en los pájaros, en las hormigas
que traen con dificultad
una astilla perdida en la infancia.
Ni al menos
la claridad que quema
el paisaje.
Al fondo de tu cuerpo
esos excesos no llegan.
Hay un cofre: has perdido la llave.
Una música dentro insiste.
Al lado un reloj que marca
las dos de la mañana.
Y en ese cofre tuyo
siempre son las dos.
Por eso
nada adelanta el tiempo de afuera.
Por eso
queda esa cosa triste,
indefinible, en el aire.
Y en tu cuerpo, y en ese cofre
delante de un reloj
a las dos de la mañana.
Luego, queda esperar
algo que no se sabe de cierto
qué es, si es que existe – y por qué vendrá.
Algo mayor que esa hora postrera, terrible.
Y que pueda hacer
girar al reloj.
Poesia similar:
- Andan los relojes Andan los relojes. Andan los planetas. ¿Cómo andamos? Ando a tropezones. Ando enfermo. Ando con hambre. Ando sin plata. Ando […]...
- Hay un tiempo tendido en los relojes Hay un tiempo tendido en los relojes Cuando estallan silencios En las viejas maderas de la casa Y atrapados quedamos […]...
- Queda prohibido Hola vida mía, tengo algo que decirte, escucha atentamente estas palabras las cual no volveré a repetir mas; queda prohibido […]...
- La nave de la china La nave de la China que llegó a Acapulco le trajo a la noble Marquesa de Uluapa un cofre de […]...
- Reloj Reloj; que marcas las horas igual que marcas el tiempo, Mi pluma se va quebrando mis manos ya no las […]...
- Quizas ya no pueda callar mas Quizas ya no pueda callar mas el ruidoso tic-tac de mi reloj. Como saber apagar el latido concurrente de un […]...
- De cuando en cuando vienen los colores De cuando en cuando vienen los colores Tiñendo los recuerdos; primaveras Pasadas, luminosas, verdaderas, Grávidas de campanas y de flores. […]...
- Otra historia Mi casa sigue siendo una calle miserable En cualquier esquina de la vida, Un signo de vaguedad extrema Un vaivén […]...
- Oda a un reloj en la noche En la noche, en tu mano brilló como luciérnaga mi reloj. Oí su cuerda: como un susurro seco salía de […]...
- Tiempos del otro vivir «Pero ¿existe algo humano sin imperfección? Y después de todo, bueno, vamos adelante» K. Kavafis ¿Qué hora de presagio o […]...
- Amor no es Ya ni versos escribo, sólo queda este soñar de lágrimas teñido, y una queja distante en el olvido azul lejano […]...
- Al final de la tarde Al final de la tarde dime tú ¿qué nos queda? El zumo del recuerdo y la sonrisa nueva de algo […]...
- Tengo ojos Tengo ojos para ver en esta noche algo de lo que soy, tengo el oído oyendo. Estoy en este cuarto, […]...
- Agape Hoy no ha venido nadie a preguntar; ni me han pedido en esta tarde nada. No he visto ni una […]...
- De otros poemas (vii) Queda de manifiesto que no hay habitantes en la luna que las sillas son mesas que las mariposas son flores […]...
- Ya se fue la ciudad Cómo marcha el reloj sin darse prisa con tal seguridad que se come los años: los días son pequeñas y […]...
- Te vas Te levantas, te cambias. Me besas y te vas. Te veo alejarte Esperando que el camino te lleve algún lugar. […]...
- Se que es realmente pero no lo quiero admitir Que es lo qe me pasaa, que no quiero admitir? Que es esto que sientoo dentro de mi Es algo […]...
- Cosas Severamente, pero también con abundante serenidad, los Amigos se han marchado para siempre. De la vida te queda su Dulce […]...
- Efectos de la palabra ¿Para qué aguardar, Si ya desintegra La forma de un reloj? Es inútil borrar el registro Del cerebro humano, E […]...
- Consulta ¡Pasionaria azul! Yunque de mariposas. ¿Vives bien en el limo De las horas? (¡Oh, poeta infantil, Quiebra tu reloj!) Clara […]...
- Deshecho de esencia El tiempo aniquila rotundamente Todos los anhelos cósmicos De un ser que busca Su misma esencia En la introspección profunda, […]...
- «tiempo de entrega» Las horas pasaban sobre el reloj, Los miedos se ahogaban en el amor. Lo sentidos nos mostraban lo que había […]...
- Andenes Te gusta llegar a la estación cuando el reloj de pared tictaquea, tictaquea en la oficina del jefe-estación. Cuando la […]...
- Hilos rotos De las terrazas inquietas y los puentes cuyas piedras Nos convocan tristemente, de la sangre que Deshila los presentes de […]...
- Recado Te dejo un beso debajo de las sienes. En la ventana un poco de la luz Para que inicies otra […]...
- He ido marcando con cruces… (poema xiii) He ido marcando con cruces de fuego el atlas blanco de tu cuerpo. Mi boca era una araña que cruzaba […]...
- Paisaje (Pablo Burchard) Conjunción agreste de tierra silenciosa, Solaz y alivio que enamoran al verse Toman en prenda a los ojos, […]...
- Prefiero soñar quiero escudriñar en el fondo de tu mirar Para ver si al menos me llevas grabado en ti. Darle forma […]...
- Deshaced este verso Deshaced este verso. Quitadle los caireles de la rima, el metro, la cadencia y hasta la idea misma. Aventad las […]...
- Efialtes En el fondo del sueño están los sueños. Cada noche quiero perderme en las aguas obscuras que me lavan del […]...
- Lo que se queda Lo que se queda Es la estación de llegada, Es como el aletear de un pájaro Que ha dejado de […]...
- Cantares iii Todos sentimos igual Cuando la pena es pareja. El amor no es cosa nueva…, El dolor es cosa vieja: Y […]...
- Mural sin tregua Me duele verte vivir sentir el río de tu cuerpo lleno de barcos y arrecifes. Me duele ver que te […]...
- Otro día del padre sin ti Es extraño nada queda Del dolor devastado, ¡nada queda! Sólo tus cosas Tus papeles de notas …quizás tus palabras Y […]...
- Poema póstumo El libro que estoy escribiendo Es una tumba anticipada. Si hiciera una lista de aquello Que no me queda Sería […]...
- Empezamos Empezamos midiendo con la mano el patio, el cielo de la antigua escuela; ahora solamente sopesamos el llanto de la […]...
- En la hora de nadie Cuando el corazón de La rosa Cae entre las piedras Y sangra, Los pétalos se demoran En gritos sin remedio. […]...
- Aun, si me fueras fiel Aun, si me fueras fiel, me quedas tú en el mundo, sombra amada. Muere el amor, mas queda su perfume. […]...
- La nueva ciudad Tengo dos meses de poemas esperándote en la mesa, un chorro de sueños pendientes en mi almohada la soledad más […]...