Dikt EvocaciÓn

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2. Soneto Como sois parecida, Señora, a quien yo amaba, Igual es vuestro acento a su voz inerte, Murmura extrañamente, y hace […]...
3. Evocación de silves (poema arabigoandaluz) &nbspEa, Abu Bakr, saluda mis lares en Silves y pregúntales si, como pienso, aún se acuerdan de mí. &nbspSaluda al […]...
4. Panegírico a al-muzaffar, hijo de almanzor, sucesor suyo en el poder sobre el al-andalus (1002-1009) ¡Que Dios te muestre lo que deseas y que no cesen de aumentar tus altos hechos! Los signos de su […]...
5. Evocación Te busqué en el baúl de la añoranza Encontré sin querer mi desconsuelo Indagando por fin sobre aquél suelo Un […]...
6. Evocación Aquel café de barrio, destartalado y frío, testigo silencioso de nuestras confidencias, extremo de rigores, conjunto de inclemencias, que sólo […]...
7. Evocación Mi corazón enardecido evoca, En esta soledad inquebrantable, La tibia sensación con que mi boca, Se deleitaba de una fuente […]...
8. Primera evocación Recuerdo bien a mi madre. Tenía miedo del viento, era pequeña de estatura, le asustaban los truenos, y las guerras […]...
9. Evocacion del vendaval A mis hermanos Cuánto daría por volver A sentir en la noche oscura De este Callejón de las Monjas El […]...
10. Evocación de la doncella El rostro dúctil de la niña, la sonrisa etérea de la niña, la cadera ansiosa de la niña, el rotundo […]...
11. Arqueología Dirán entonces: aquí estuvo la sala, y más allá, donde encontramos los fragmentos de levísimo barro, el sitio del calor […]...
12. Teme que su afecto parezca gratitud y no fuerza Señora, si la belleza Que en vos llego a comtemplar Es bastante a conquistar La más inculta dureza, ¿Por qué […]...
13. Al emperador Ya se acerca, Señor, o ya es llegada, la edad gloriosa en que proclama el cielo un Pastor y una […]...
14. Cuentas de mÁrmol Yo, la estatua de mármol con cabeza de fuego, Apagando mis sienes en frío y blanco ruego… Engarzad en un […]...
15. Soy el que espera ahora SOY el que espera ahora La ascensión de los días desde las ramas altas. He escuchado las voces De las […]...
16. Olores ¿A qué huele el mundo ahora detrás de tu rosa blanca? A pérdida. ¿A qué detrás de tu calor que […]...
17. Sonetos bíblicos (ii) sulamita Pues ya si en el exido De hoy más no fuere vista ni hallada, Diréis que me he perdido, Que […]...
18. Señora del bel mirar Nadie que los viera nadie dejara de abrir baja tus ojos graciosos no mates a quien te mira sino con […]...
19. Llueve Llueve. La lluvia mancha las calles. El asfalto mojado es lustroso. Los peatones se cubren. El sombrero cubre la cabeza. […]...
20. Como la madre a quien falta Como la madre a quien falta el tierno y amado hijo así estoy cuando no os veo, dulcísimo dueño mío. […]...
21. Juventud alzarse en busca del futuro Juventud alzarse en busca del futuro, éstes vuestro, igual esta tierra, que alberga a sus abuelos, a la memoria, la […]...
22. A una dama que iva cubierta El corazón se me fue donde vuestro vulto vi, e luego vos conocí al punto que vos miré; que no […]...
23. Escala de amor Estando triste, seguro, mi voluntad reposaba, cuando escalaron el muro do mi libertad estaba. A escala vista subieron vuestra beldad […]...
24. Las afueras (v) De noche, cuando desciendas. Pero es inútil, nunca he de volver a donde tú nacías ya con forma de recuerdo. […]...
25. Infiel He sido infiel… lo confieso Pero en mi defensa digo Que solo duro un instante Ese arrebato de amor. Fue […]...
26. DespuÉs de tantos aÑos Después de tantos años, La lluvia te ha calado hasta los huesos Y tú sigues en pie bajo la lluvia. […]...
27. Señora, flor de azucena Señora, flor de azucena, claro viso angelical, vuestro amor me da gran pena. Muchas en Extremadura vos han gran envidia […]...
28. Soneto xxiii En tanto que de rosa y de azucena se muestra la color en vuestro gesto, y que vuestro mirar ardiente, […]...
29. Una corona no, dadme una rama Una corona, no, dadme una rama de la adelfa del Gévora querido, y mi genio, si hay genio, habrá obtenido […]...
30. El hijo prodigo El hijo prodigo Por si vuelve algún día Con la mirada perdida Y con su tristeza a cuestas No te […]...
31. Preceptiva poética I Poesía…, tristeza honda y ambición del alma… ¡cuándo te darás a todos… a todos, al príncipe y al paria, […]...
32. Miradas MIRADAS Entras en mi vida mirando La tristeza de mi alma Yo la tuya me quedo viendo ¿Y tú qué […]...
33. Alegráos Alegráos con las flores que embriagan, las que están en nuestras manos. Que sean puestos ya los collares de flores. […]...
34. Aún no amanecido Aún no amanecido, Todo está dormido Y el tiempo parece estar detenido. No hay más compañía que el silencio Y […]...
35. Imagen cotidiana Este desánimo eterno y pegajoso, esta intransigente búsqueda perfecta de ti. Ya no hay lunes mal HumorAdos ni eufóricos viernes […]...
36. Melancolía (A Matías) Como cuando se regresa Por el invierno a la casa A través de unas callejas Solitarias y nostálgicas […]...
37. La ciudad La ciudad perdida es hermosa. allí tus más bellos sueños bajan peldaños de espuma. se mezclan con las aguas antiguas […]...
38. Existes Es belleza t u presencia desnuda, Como brisa que atraviesa mi cuerpo. Mi memoria, que abraza tu ausencia, Tu voz, […]...
39. Xx Allí nos detuvimos: sí: dispersos Como fogatas bien avenidas a un tiempo de confianza Como timones dúctiles que sufren en […]...
40. El otro día está aquí Nadie diría que hemos envejecido. Nadie sabe cuánto tiempo ha pasado. Él todavía tiene cabellos oscuros en las sienes, aquellos […]...