Hoy recuerdo a los muertos de mi casa. Al primer muerto nunca lo olvidamos, aunque muera de rayo, tan aprisa […]

Una casa, un jardín, no son lugares: giran, van y vienen. Sus apariciones abren en el espacio otro espacio, otro […]

A los poetas André Bretón Benjamín Péret A las diez de la noche en el Café de Inglaterra salvo nosotros […]

A Rafael Vega Albela, que aquí padeció Devora el sol final restos ya inciertos; el cielo roto, hendido, es una […]

Ruidos confusos, claridad incierta. Otro día comienza. Es un cuarto en penumbra Y dos cuerpos tendidos. En mi frente me […]

Dentro de un sueño estaba emparedado. Sus muros no tenían consistencia Ni peso: su vacío era su peso. Los muros […]

Ya por cambiar de piel o por tenerla nos acogemos a lo oscuro, que nos viste de sombra la carne […]

I Dios insaciable que mi insomnio alimenta; Dios sediento que refrescas tu eterna sed en mis lágrimas, Dios vacío que […]

El mediodía alza en vilo al mundo. Y las piedras donde el viento borra lo que a ciegas escribe el […]

Trueno y viento: duración I CHING I Negro el cielo Amarilla la tierra El gallo desgarra la noche El agua […]

Ráfagas turquesa loros fugaces en parejas Vehemencias el mundo llamea Un árbol hirviente de cuervos arde sin quemarse Quieta entre […]

En filas ordenadas regresamos y cada noche, cada noche, mientras hacemos el camino, el breve infierno de la espera y […]

1 Vuelve a la noche, racimo de horas sombrías; córtalo, come el fruto de tiniebla, saborea la ignorancia 2 Con […]

Mudo, tal un peñasco silencioso desprendido del cielo, cae, espeso, el cielo desprendido de su peso, hundiéndose en sí mismo, […]

I Abre simas en todo lo creado, abre el tiempo la entraña de lo vivo, y en la hondura del […]

El presente es perpetuo Los montes son de hueso y son de nieve están aquí desde el principio El viento […]

Como una madre demasiado amorosa, una madre terrible que ahoga, como una leona taciturna y solar, como una sola ola […]

El nombre Sus sombras El hombre La hembra El mazo El gong La i La o La torre El aljibe […]

Inmóvil en la luz, pero danzante, tu movimiento a la quietud que cría en la cima del vértigo se alía […]

En un rincón del salón crepuscular O al volver una esquina en la hora indecisa y blasfema, O una mañana […]