El autor Pablo Neruda

Ebrio de trementina y largos besos, estival, el velero de las rosas dirijo, torcido hacia la muerte del delgado día, […]

Ni el corazón cortado por un vidrio en un erial de espinas, ni las aguas atroces vistas en los rincones […]

El día de los desventurados, el día pálido asoma con un desgarrador olor frío, con sus fuerzas en gris, sin […]

De consumida sal y garganta en peligro están hechas las rosas del océano solo, el agua rota sin embargo, y […]

Tienes del archipiélago las hebras del alerce, la carne trabajada por los siglos del tiempo, venas que conocieron el mar […]

Aquí te amo. En los oscuros pinos se desenreda el viento. Fosforece la luna sobre las aguas errantes. Andan días […]

Amor, amor, las nubes a la torre del cielo subieron como triunfantes lavanderas, y todo ardió en azul, todo fue […]

Oh dama sin corazón, hija del cielo, auxíliame en esta solitaria hora con tu directa indiferencia de arma y tu […]

Yo hago la noche del soldado, el tiempo del hombre sin melancolía ni exterminio, del tipo tirado lejos por el […]

Si me preguntáis en dónde he estado debo decir «Sucede». Debo de hablar del suelo que oscurecen las piedras, del […]

Tengo el corazón pesado con tantas cosas que conozco, es como si llevara piedras desmesuradas en un saco, o la […]

Bueno… ahí terminó lo que te traía: mi poesía, para tí, para este día, para esta tarde, para esta noche […]

Oh ciego sin guitarra y con envidia, cocido en tu veneno, desdeñado como esos zapatos entreabiertos y raídos que a […]

Juegas todos los días con la luz del universo. Sutil visitadora, llegas en la flor y en el agua. Eres […]

Abeja blanca zumbas ebria de miel en mi alma y te tuerces en lentas espirales de humo. Soy el desesperado, […]

Para que tú me oigas mis palabras se adelgazan a veces como las huellas de las gaviotas en las playas. […]

Dejo a los sindicatos del cobre, del carbón y del salitre mi casa junto al mar de Isla Negra. Quiero […]

Como cenizas, como mares poblándose, en la sumergida lentitud, en lo informe, o como se oyen desde el alto de […]

Tengo miedo. La tarde es gris y la tristeza del cielo se abre como una boca de muerto. Tiene mi […]

Cuerpo de mujer, blancas colinas, muslos blancos, te pareces al mundo en tu actitud de entrega. Mi cuerpo de labriego […]