Dikt Jardim das amoreiras
Nada sabemos de su química,
De cómo se combinan
Intimidade con penumbra,
La infancia en las moreras,
La altura con el agua;
De cómo sobreviene, protegido, el espacio,
Envolvente el barullo;
De cómo se articula lo sensible.
Tuvo que manar de la anónima corriente,
Al pie del acueducto,
Pulida en su rectángulo
La fórmula impensable.
Debió de acontecer el privilegio,
Tan secreta y voraz,
Tan frágil la razón de lo evidente,
Que apenas si supimos
Lembrar as descobertas,
Aos quatro ventos, ficar com o esquivo,
Porque nada sabemos de la química
Y el gusano de la seda siempre se aparece
Del lado de lo incierto.