Dikt Cuerpiada
Sos cumba, chirusa: Tata Dios, p’hacerte
Tuvo la cachasa de parar rodeo
Al lote de cosas más lindas del mundo
Y a la tropa’e luces qu’empilchan el cielo.
Campió entre sus noches la más renegrida,
Pulió su negrura con briyo’e luceros,
Y en finas hebritas la jué deshilando
Pa formar con eyas la mata’e tu pelo.
Mesturó tu carne con raspa de luna,
Robó a los mimbrales gracia pa tu cuerpo,
Y en ves de dos ojos prendió en tu carita
Dos soles gurises emponchaos de negro.
Redochó su cencia p’hacer tus caderas;
Con maña y esmero redondió tus senos;
Y, tal ves po’el gusto de chasquiar avispas,
Difrasó’e malvones tus labios de juego…
Sos cumba, no hay duda. ¿Pero’e qué te vale
Si tenés el alma lo mesmo que un yelo,
Si nunca una sola miajita’e ternura
Te puso su chispa de vida en el pecho?
¡No sé pa qué puncha te sirve ser linda
Si no hay en tu duro corasón un güeco
Ande’l sentimiento se cuaje’n dulsuras
Y se abra fragante la flor de un afeto!
Campiá otro más sonso. Yo no m’encalacro.
El briyo’e tus ojos no ahuyenta mi sueño.
¿O cres por si acaso que soy burleta
Pa dir a quemarme las alas en eyos?
¡Erraste’l mingaso! ¡A mí, pa boliarme,
Precisa que me hagan un tiro más cierto!
¡Yo quiero una china que sienta y comprienda
La vos del boyero que yevo en el pecho!