Aquello sí que fue Pan comido – decía El gran Julio a su Bruto que, alarmado, No sabía muy bien […]

La línea recta cúrva – Se inexorablemente En el espacio. El tiempo Se detiene en los pasos De la luz. […]

Ni muy feliz, ni triste. Como tantas, Parecerá insensible a cuanto pueda Ocurrir a su lado. Cada día Andará iguales […]

Levanté un monumento más perenne que el bronce, Y más alto que esas faraónicas Pirámides gastadas, que ni las inclemencias […]

No me preguntes cómo pasa el tiempo Li Kiu Ling No me preguntes cómo pasa el tiempo. El caso es […]

¿Compararé tus ojos a las quietas Estrellas de la noche? ¿O, utilizando Resabiadas metáforas de Oriente, Diré que hay en […]

Os encomiendo, padres, a la pequeña Erotion Que hacía mis delicias, para que No sufra, temerosa, ante las negras Sombras […]

Una mujer de ojos verdes irá en estos momentos Por Tottenham Court, hacia Oxford Street. Otra, de negra cabellera, estará […]

HABLAN de la Naturaleza, y es hermosa -dicen sin más razones-; yo prefiero Más bien hablar de un caos, aciago […]

El instante es azul El mar, aquella quieta Piedra verde que ocupa la mañana Palpitante Abierta como un párpado la […]

Jadeantes inquietos tercos púgiles De cristal Apenas unas cuantas Gaviotas colocadas aquí y allá Con gracia Las desnudas Rodillas en […]

Como el árabe aquel Que el otro día estaba, Anacrónico y alto, haciendo cola Para tomar el vuelo De Londres, […]

Mis escasos cabellos ya son blancos. Mi juventud se fue. También mis dientes. Lloro E intento rebelarme: el más allá […]

La inderogable forma de la efigie Corrobora la ausencia de unos ojos, El perfil se demora, minucioso, En pulcritud de […]

ESTÁ entre las cosas que me acechan; En el mar de esa tarde no esperada Que hoy es una tristeza […]

Tu carne Tan desnuda quieta En la oscuridad Tus pechos dos Temblores dos Lunas en medio de la noche Mis […]

¿Recuerdas una tarde en que te puse flores Granates en el pelo, allá en el Aventino? Parecías talmente una diosa […]

El ciego Amor se me posó en los ojos Y te vi como sólo puede él ver a sus hijos: […]

Con la tarde Se alejan Hacia lugares últimos Solemnes Lentas naves anónimas Que guardan Esa misma certeza Ineludible De los […]

Las olas que vinieron a morir a mis pies cada verano, desde mil novecientos cuarenta y seis. El cigarrillo roto […]