Dikt El cristiano que mata
Lo mismo en Las Cruzadas
Que en Santa Inquisición,
Muertes ‘autorizadas’
Mancharon las jornadas
De nuestra religión.
Los clarines resuenan
Con su agudo cantar
Y los fusiles truenan
Los disparos que frenan
Del mílite su andar.
Es la guerra que mata
Y propina un revés
Al soldado que trata
Con vocación innata
Servir con honradez.
La Patria lo reclama
Y al frente con rigor
Le exige que la llama
De la antorcha que inflama
Empuñe con honor.
Pero a un tiempo le exige
Mirar con aversión
Al bando que dirige
Las armas con que inflige
La muerte y destrucción.
Le infunde con malicia
Que es hacer su labor
Cumplir con la milicia,
Y que obra con justicia
Matando sin temor.
Le promete medallas
A cambio del horror
Que en todas sus batallas
Sembrará con agallas
Ajenas al amor,
Y él siente en su conciencia
Cristiana reprensión.
Mandamiento y esencia
De espiritual creencia
Que al matar no hay perdón.
Sabe que Dios da vida
Y la puede quitar:
¡¡¡ Ni en lucha combatida
Ni en guerra defendida
Hay justicia al matar!!!
Y aunque hombres con sotana
‘por defender la fe’
La tilden de cristiana,
La guerra es inhumana
Y es contraria a Yahvé.
MEMORIA:
31 de Enero de 1972 «DOMINGO SANGRIENTO» («BLOODY SUNDAY») El gobierno y los habitantes protestantes de Irlanda del Norte mataron a mansalva a 13 manifestantes católicos desarmados, pretexto para que una guerra sin cuartel continuara por décadas, con acciones desalmadas del IRA (Ejército Revolucionario de Irlanda de extracción católica).