Dikt Un bohemio
Noche tras noche podían encontrarle,
Sumido en sus pesares,
Sentado en las cantinas,
A un bohemio joven, cegado de tristeza,
Que sin cesar bebía, hasta perder la cuenta.
Habían ocasiones en las que sus amigos,
Decíanle no tomes, ¿no ves que te destruyes,
Si sabes que no hay caso que sufras por aquella,
Esa mujer que un día jugaba con tu amor?
Mas, él nada escuchaba, ni súplicas ni ruegos,
Tan sólo en su porfía, bebía más y más,
Tomaba tanto, tanto, que lástima causaba,
Pues eran varios meses que en ello se pasaba.
En muchas ocasiones, sin contener su pena,
Regaba largos llantos, amargos y muy tristes,
Que a muchos que allí estaban
Bebiendo a su contorno,
Se les partía el alma, mirando su desdicha.
Ya era conocido en todas las tabernas,
Este muchacho herido por una mujer mala;
Aquella que con saña, dejole abandonado,
Perdido en el despecho, hundido en el licor.