Y tu retórica
Si lo escribió mi prisa feliz, ¿con qué palabras, cómo dije: «palomas cálidas de tu pecho»? En sus picos leería: […]
Si lo escribió mi prisa feliz, ¿con qué palabras, cómo dije: «palomas cálidas de tu pecho»? En sus picos leería: […]
Hoy me quito la máscara y me miras vacío y ves en mis paredes los trozos de papel no desteñido […]
Me he querido mentir que no te amo, roja alegría incauta, sol sin freno en la tarde que sólo tú […]
La isla está rodeada por un mar tembloroso que algunos llaman piel. Pero es espuma. Es un mar que prolonga […]
En esa frente líquida se bañaron Susanas como nubes que fisgaban los viejos desde las niñas de mis ojos púberes. […]
Esta mañana te sorprendo con el rostro tan desnudo que temblamos; sin más que un aire de haber sido y […]
Aquel camino, desde la montaña, con la hemorragia larga de su barro, baja, poquito a poco, hasta la botica aldeana. […]
Me quedo en tus pupilas, sin convite a tu fiesta de fantasmas. Adentro todos trenzan sus efímeros lazos, yo solo […]
Allá en mis años Poesía usaba por cifra una equis, y su conciencia se llamaba quince. ¿Qué van a hacer […]
Las cosas que entran por el silencio empiezan a llegar al cuarto. Lo sabemos, porque nos dejamos olvidados allá adentro […]
Y saber luego que eres tú barca de brisa contra mis peñascos; y saber luego que eres tú viento de […]
Apuntamos aquel cielo que se nos desplomaba, verdinegro. Los que pasaban a lo lejos eran -sombras chinescas en la pantalla […]
Mañana. Acaso el sol golpea en dos ventanas que entran en erupción. Antes salen los indios que pasan al mercado […]
Espera, octubre. No hables, voz. Abril disuelve apenas la piel de las estatuas en espuma, aún canta en flor el […]
Recuerdo el paraje del aire donde se guardan las cartas perdidas, las palabras que decimos, cuando pasa un tren, seguros […]
Por el amor de una nube de blanda piel me perdí duermo encadenado al cielo sin voz sin nombre sin […]
¿Y aquel otro caminito del cielo por donde anoche fueron nuestros ojos? Cuatro príncipes iban sobre él; cuatro pilares de […]
Pero me romperé. Me he de romper, granada en la que ya no caben los candentes espejos biselados, y lo […]
Encadenado al cielo, en paz y orden, mutilado de todo lo imperfecto, en esta soledad desmemoriada -paisaje horizontal de arena […]
Primero está la noche con su caos de lecturas y de sueños. Yo subo por los pianos que se dejan […]