Siempre fui mi pene
Siempre fui mi pene, Dios mío, siempre fui el pedazo de mi carne que entraba en las mujeres, que me […]
Siempre fui mi pene, Dios mío, siempre fui el pedazo de mi carne que entraba en las mujeres, que me […]
– Mira la luna. La luna es tuya, nadie te la puede quitar. La has atado con los besos de […]
Cuando tengas ganas de morirte esconde la cabeza bajo la almohada y cuenta cuatro mil borregos. Quédate dos días sin […]
Habría que bailar ese danzón que tocan en el cabaret de abajo, dejar mi cuarto encerrado y bajar a bailar […]
He aquí que tú estás sola y que yo estoy solo. Haces cosas diariamente y piensas y yo pienso y […]
Me dicen que debo hacer ejercicio para adelgazar, que alrededor de los 50’s son muy peligrosos la grasa y el […]
Con la flor del domingo ensartada en el pelo, pasean en la alameda antigua. La ropa limpia, el baño reciente, […]
¡Qué costumbre tan salvaje esta de enterrar a los muertos!, ¡de matarlos, de aniquilarlos, de borrarlos de la tierra! Es […]
Apenas mayordomo de mis penas, capitán de fantasmas, me extravío, me pido entre mis canas y mis venas, y me […]
En medio de las risas y testigo del llanto, oyendo y viendo gentes remotas a mi lado, en una soledad […]
Cuando estuve en el mar era marino este dolor sin prisas. Dame ahora tu boca: me la quiero comer con […]
Tú eres mi marido y yo soy tu mujer. Tú eres mi hermana y yo soy tu hermano. Tú eres […]
Me encanta Dios. Es un viejo magnífico que no se toma en serio. A él le gusta jugar y juega, […]
Uno es el hombre. Uno no sabe nada de esas cosas que los poetas, los ciegos, las rameras, llaman «misterio», […]
Roto, casi ciego, rabioso, aniquilado, hueco como un tambor al que golpea la vida, sin nadie pero solo, respondiendo las […]
No es que muera de amor, muero de ti. Muero de ti, amor, de amor de ti, de urgencia mía […]
Amor mío, mi amor, amor hallado De pronto en la ostra de la muerte, Quiero comer contigo, estar, amar contigo, […]
Recién parido en el lecho de la muerte, criatura de la paz, inmóvil, tierno, recién niño del sol de rostro […]
Sólo una tonta podía dedicar su vida a la soledad y al amor. Sólo una tonta podía morirse al tocar […]
No quiero paz, no hay paz, quiero mi soledad. Quiero mi corazón desnudo para tirarlo a la calle, quiero quedarme […]