Dikt Sol del otoño (ii)
Como el zagal, absorto en los mugidos del rebaño,
Miras, sol del otoño, el soto, los abedules blancos
Y los vaivenes de los mirlos
Tus ojos son los ojos de los pastores,
Y tus manos son las manos de las madres
Como los astros que trajinan en sus órbitas azules,
Sol del otoño, recomponiendo el mundo
Con suavidad, nos vas ungiendo nuestras llagas,
Sol del otoño, curando nuestras heridas
Como el zagal, que se revuelca en el regazo de las hojas
Retozas, sol del otoño, sobre el musgo de los robles
Y los lienzos de los líquenes
Tus ojos son los ojos de la brisa
Y tus dedos la dulce flor de la vendimia
Como los pámpanos azules que va cortando
Un divino podador a quien no vemos
Como un fanal, colgado en el dintel de un corral lejano
Y orientado hacia la noche
Sol del otoño, tus besos son los cabeceos
De los barcos que regresan en la niebla
Como un zagal vencido por el sueño
Te hundes en el regazo de las hojas
Confiado en que nosotros te velemos