Dikt Para un viejo amigo
Mi noche se hunde en la orilla de tus palmas
Te veo inalcanzable montando tu unicornio cojo
Arrastrando los años, los meses, las semanas, los días, tus momentos….
Eres es triste hombre que disimuladamente llora en una esquina
Con el bolsillo nazareno
Cuando el hambre no te da que comer
Cuando la sed te enseña a beber nuevamente tú saliva.
Acaso me equivoco
Cuando evoco a la memoria
Como único sustento a tu vida
Y te veo con tu sonrisa enjovenecida nuevamente
Con un desierto de arena en tu cabeza que juega a desaparecerte
Con las manos encallosas
Y tus pies grandes asfaltados.
Fue sábado por la tarde,
Cuando tú fuerza recurrió a un hospital de la muerte
Eras tu nuevamente 30 años después
Con la mirada caída, los hombros torcidos
Los cabellos pintados por los años
Y con una sonrisa fingida.
Hoy mi noche se hunde nuevamente en tus palmas
La oscuridad me consume
Oigo tus pasos
Andando de tumbo en tumbo
Al norte quizás quien sabe
Siento que te alejas
Con cada lágrima más
Parece que vuelas con las alas prestadas
Siento tu respiración
Al sur.
Pero un no puedo tocarte
Donde estas
No siento tu cuerpo
Pero creo que estas cerca
Donde estas abuelo
Me pregunto con los ojos convertidos en gotas de sal
Noche a noche
Encerrado en mi demencia.