Dikt Fevereiro
Yo fui feliz un mediodía
Robado a la tarifa del invierno.
Crucé los sellos del deber y tuve
En postigos del Sur
El ocio imponderable de otro mar
Abriéndome las venas.
La belleza alisaba las costuras
Del luego en otra parte
O por si acaso,
Embebía la dimensión del hueco
Que la historia reparte en las esquinas
De las plazas minúsculas.
Hilé los pasadizos, los túneles sin fecha
Suspendido en el hombro del número perfecto.
Rocé las crines,
La calma súbita,
La botella de luz
Con que acoge el reloj de los vestíbulos.
Corren por mí las calles del encuentro.
Las uvas del futuro endulzan
El puerto que entretuve,
Tan propiamente cómplices,
La vez que fui feliz y posesivo.
(1 votos, promedio: 5,00 de 5)
Poesia similar:
- Acta de independencia Independientemente de los designios de la Iglesia Católica me declaro país independiente. A los cuarentaynueve años de edad un ciudadano […]...
- Desde que tu te marchaste Desde que tú te marchaste De eso ya hace seis meses Marco la fecha más negra Cumplo el aniversario de […]...
- Xix (.i) Se fue de saludo Espesa Tras la Lumbre de su rocío Entonando el aguacero de luna Liviana Ventura de irme […]...
- Feliz amor Feliz amor que en todo está presente aunque a la vez en nada se resuma. Sombrío altar de la encendida […]...
- El señor que aparece de espaldas El señor que aparece de espaldas no es feliz, ha ido varias veces a Roma pero no es feliz, ha […]...
- Un poema de amor No sé. Lo ignoro. Desconozco todo el tiempo que anduve Sin encontrarla nuevamente. ¿Tal vez un siglo? Acaso. ¿Acaso un […]...
- Deseos de navidad ¿Qué es la navidad? Es el calor que regresa al corazón de las personas, La generosidad de compartir con otros […]...
- Puede llamarse amor No se si esto puede llamarse amor, pero si no lo es que puede ser? Se confunde en la profundidad […]...
- La erótica (3) Tuve un segundo encuentro en el Tuyú junto al mar que bramaba como un toro y en cierto mediodía de […]...
- Mil imperfecciones Cuando el mundo sea perfecto, Y el humano sea un dios, Sera el dia en que la vida ya no […]...
- Oda al día feliz Esta vez dejadme ser feliz, nada ha pasado a nadie, no estoy en parte alguna, sucede solamente que soy feliz […]...
- Contra vosotros naciendo Tengo que dar con ese nicho que estaba ahí y no está, tengo que dar con la transparencia de esa […]...
- Muerte necia Se me ha gastado el día, atropelladamente en idas y venidas, en gestos y recados que al hacerlos juzgaba. necesarios. […]...
- Me gusta de ti Me gusta de ti, El aroma a fresias, De tu piel, Me gusta de ti, Tus suaves caricias, Que alimentan […]...
- Aquella potra AQUELLA POTRA La vi venir, era potra. Con ese andar precioso, Sus bellos movimientos, Resaltaban con el brillo de sus […]...
- Parió la luna Altamar del Mar Caribe. Noche azul. Blanca goleta. Una voz grita en la noche: -¡Marineros! ¡A cubierta! Es el aullido […]...
- El río A Jorge Luis Borges Ignora qué leopardos o qué olivos colaboran en su número de llamas. En qué oscuras entrañas […]...
- Mi amor (para mi esposo) CUANDO DESCUBRI MI AMOR POR, TI SENTI RENACER SENTIMIENTOS DORMIDOS Y MIS DIAS SE CUBRIERON DE UNA LUZ HERMOSA AL […]...
- Primera y única declaración del señor Yo sólo quiero que seas feliz, no te amo soy tu amigo y aprecio tu amor mi cariño es infinito […]...
- El filamento Óptico Y será y será y será la mitad de la mitad de mi rumbo hacia la estrella del alma montada […]...
- Ii (cancion para manuel) Un dios de pies livianos camina por el techo Un auriga de caballos invisibles Una brizna que acaricia el rostro […]...
- La guardia nacional anda buscando a un hombre La Guardia Nacional anda buscando a un hombre. Un hombre espera esta noche llegar a la frontera. El nombre de […]...
- La poda España que alborea con un hacha en la mano vengadora… Antonio Machado ¡Qué fe retoñaría si nosotros pudiéramos ponernos una […]...
- Solo para ti Solo para ti.. Pues si te quiero y no es por nada simplemente es que eres perfecto, si eres perfecto […]...
- No sÉ por quÉ piensas tÚ No sé por qué piensas tú, soldado, que te odio yo, si somos la misma cosa yo, tú. Tú eres […]...
- MonÓlogo del viajero Un hombre Se refugia en un cuarto Porque en las calles Sólo hay monólogos De medianoche Un hombre vuelve Y […]...
- Que mas puedo pedir ¿Qué más puedo pedir? Si soy feliz contigo, Soy muy feliz al saber que cuento con la más linda mujer, […]...
- Nathalie Estuvimos a punto de ejecutar un trabajo perfecto, Nathalie en una casa de piedra de Provenza. Dirás ahora que todo […]...
- Mas ¿qué mudanza súbita? Mas ¿qué mudanza súbita? La orquesta Se precipita alegre, y en el aire Con gracioso donaire La ninfa sin cesar […]...
- Que bonita es la amistad Que bonita es la Amistad cuando se dá con el alma Sentimiento bendito que nace del corazón Proveniente de Dios […]...
- Coplas De no hallar en mis amores el número de mi mesa sabe Dios cuánto me pesa. Cuéstame hartos desvelos celos […]...
- Felíz día de san valentín SE DICE QUE DESDE NUESTRO NACIMIENTO HASTA NUESTRA FECHA… DIOS CONSTANTEMENTE NOS MANDA A SUS SOLDADOS, SUS ANGELITOS, PARA QUE […]...
- El amor El AMOR. El amor es dormirse todas las noches pensando en la otra persona. -Como me pasa a mi. El […]...
- Las campanas de la muerte-arqueros del alba 18 Soneto XV Prendieron las antorchas su belleza, Las luces, el color y la hermosura, Las llamas de una súbita ternura […]...
- Salvación de la palabra (5) Y así fue la palabra entre los hombres silenciosa, en el ruido miserable y la pena, arca donde está el […]...
- Yo te di huesos Los muertos odian el número dos. F. G. Lorca Yo te di huesos de palomas rojas de palomas que alientan […]...
- Se más feliz que yo Sobre pupila azul, con sueño leve, tu párpado cayendo amortecido se parece a la pura y blanca nieve que sobre […]...
- La soledad es fuerte Un solo corazón ama por dos, por tres, por cuatro, y por todos aquellos que han dejado de amar. Y […]...
- Dulzura Madrecita mía, madrecita tierna, déjame decirte dulzuras extremas. Es tuyo mi cuerpo que juntaste en ramo; deja revolverlo sobre tu […]...
- Umbral de la tormenta Más allá de la fronda enjaulada En las crines del deseo embridado, Más allá de la epidérmica frontera De las […]...