Dikt Amor clandestino
Mientras Antonio derribaba palabras y subía a luchar a las montañas,
Andrea aprendía el idioma de las aves. Afuera corría la muerte y
Despuntaba el hambre. El era un niño echado a rodar por los caminos, entre
Clínicas móviles, proyectiles y malarias. Ella…en su ardor adolescente
Atrapaba la luna en las fauces del mar.
Antonio volvía en el borbollar de los arroyos con sus brazos en cruz y sus
Ideales batiendo a las banderas…Andrea encontraba la sonrisa en su
Cintura, extraña y desprendida sin coincidir jamás.
Un nuevo sobresalto – Muchacho te busca un guardia – dijo tío Alfredo –
Mejor te vas mañana mismo a California.
Y Antonio se esconde y apaga la luz bajo la almohada…Piensa en su lucha,
En las células clandestinas de Santa Anta y las doce campanadas llegan.
Nuevas vueltas en el reloj.
No hay tiempo para despedirse ni guardar cosas.
***
Antonio se va a California con sus nubes, espejismos y mil ciclillos en el
Alma…Se va…y no vuelve a ver los limoneros en flor del jardín de la abuela
Ni el rojo horizonte en el cielo sobre el Barrio de San Jacinto…o aquellas
Calles de luz por donde caminaba solo rumbo a la escuela…Se va y las
Champas quedan atrás, con un silencio de luna en sus cartones.
La muecas de los niños aprenden un silabario sin sueños y los gatos
Regresan a los tejados.
***
En El Salvador ha terminado la guerra. Y en California, Antonio es un
Lider dentro de su comunidad de migrantes.
***
Andrea chatea en internet mientras toma café en su viejo tazón color
Púrpura.
Encuentra un correo de Antonio. Y su Amistad nace lejos de los manglares,
Los musgos y los cafetales..En otro sitio sin incienso, palmas de flores,
Ni emplumados de notas alegres…donde el viento no acostumbra a cortarle
Los tallos al recuerdo.
***
Andrea continua aprendiendo el idioma de las aves. Antonio escribe libros
Cargados de historias juveniles.
***
Andrea es un mar incógnito…Antonio el horizonte.
Ella abre las ventanas a la ausencia. El entra.
Por allí, Antonio conoce los nuevos caminos y las calles bulliciosas…
El aire está húmedo de besos.
Afuera bostezan de sueño los zaguanes.
***
Antonio regresa una y otra vez a El Salvador. Desempolva viejas
Historias, pinta las estancias, escribe al parpadeo de las velas…Andrea
Inerme lo espera…
***
Antonio volvió a irse una vez más…Andrea decidió habitar por siempre la
Cicatriz de esta tierra.