El autor Alfonso Vázquez Alonso

Las aves pasan, doble fila de duelo, Sobre el sentir primero de la Patria. Tú las miras pasar, oh Laura, […]

Querida amiga: blanca eres, rosa blanca en el hogar; En este mar de así las cosas ser o las cosas […]

Y aún un recuerdo a mi hermano, el dulce destrozado Trakl, Encargado de farmacia. Porque este oro final del día […]

El mundo frío en la noche con sus grillos de hielo. Las demasiadas posibilidades para pensar cualquier cosa. Este planeta […]

Que no son para mí las alegrías, La compañía y el oro de esta tierra. A veces tras el viento […]

La mar despierta y rompe en lejanía Largos, quedos navíos de silencio. Los desheredados viajan en las oscuras tardes Por […]

De qué modo increíble muta el oro Estival de la mies en oro-otoño; La luz que fue esplendor anuncia ya […]

Como sombra te oigo cruzar y respirar El amado jardín de otras hadas y años. De tu corazón hacia mis […]

En las orillas hablo de un ajado silencio. Tiéndeme tu mano, Soledad, desde el corazón azul profundo Del Reino del […]

De pronto en la memoria, al fondo del espejo, Al fondo del reloj, En la verde cuadratura del tiempo Sobre […]

Tus pies están quebrados como el témpano azul En los nevados días. Tu corazón se hunde por tus ojos En […]

Es el mar oscuro y gris del anochecer En época mala y mal presagio; De mala estación, de mal país, […]

Henos aquí, oh Reina de los callados labios, Blanca Rosa en mercurio, andrógino planeta, Henos aquí bajo el augurio de […]

Os recuerdo, días de nieve, transido el corazón, Al fondo del país remoto de la infancia, Con la enfermiza palidez […]

Entorno mi ventana en la noche que llega. Tan blanco y fantasmal ha sido el día que eternos Había ya […]

Querida hermana, el tiempo es largo en la distancia. La noche es larga y el corazón cansado. Sobre las fuentes […]

¡Ah la dulzura de besar en los labios Uno de esos rostros que son como la esencia Palpitante y femenina […]

Y la lluvia; la lluvia de la heredad del Norte. La lluvia que santifica las verdes colinas En que descansa […]

Sólo en ti la sabiduría, sólo en ti la verdad. Tu corazón derrama fuego Sobre la tarde en sombra de […]

Heme de carne aún, aquí, de carne que se aleja. Hago en vano y en muerte los días de la […]