Dikt Apson oda en acróstico dedicada a agua prieta, sonora, (que yo llamo apson)
A…………gua
P………rieta
SON…ora
A ntes de renacer yo preguntaba
P or el mejor lugar para la vida,
S in escuchar a Dios que a ti apuntaba. /A
O ra quedo, ora recio, me gritaba:
¡ N ace en ésa, mi tierra preferida!
¡A y!, te acepté, no muy bien convencido,
P orque no ví en tus calles pavimento.
S i acaso aquí y allá vi confundido /G
O reo de humo y polvo enrarecido;
N ada especial, más bien todo un lamento.
A cuciado por sueños e ilusiones
P use atención en la mortal grandeza.
S ed de un alma cargada de pasiones /U
O bviada de la gloria por razones
N unca bien comprendidas con certeza.
A nclé mi vuelo donde Dios lo quiso
P untilloso de todo lo invisible;
S u designio fue cauto y sin aviso /A
O bligándome a ser advenedizo,
N acional de este pueblo inconfundible.
A l trato diario con tu gente buena
P ueril en mis instintos fervorosos,
S epulté vanidad, soberbia y pena /P
O rgulloso de ti y de tu colmena,
N ave llena de obreros laboriosos.
A liento recibí para hacer todo
P almado por mi madre con ternura;
S antamente orientado con buen modo /R
O ré buscando rescatar del lodo
N ítida mi alma de la sepultura.
A ti te debo ser independiente,
P aria de ayer que descubrió la gloria
S embrada en la materia con simiente /I
O culta a la visión de mucha gente,
N orteada con error a la victoria.
A tu sombra yo quiero reencarnado
P oder volver recuperando el nido;
S infín vital, regalo no apreciado, /E
O rto repetitivo que ha olvidado
N ecio al volver el ser arrepentido.
A gua Prieta, al cruzar el cielo inmenso,
P ermite que tus luces cristalinas
S ostengan su fulgor de brillo intenso, /T
O rientando mi vuelo en su descenso
N ivelado y sutil de alas divinas.
A mor candente de tus días soleados,
P az en tus noches de estrellado cielo.
S erán de nuevo lauros codiciados: /A
¡O ro y plata, los seres hermanados
N acidos o arraigados a tu suelo!