Dikt Ebrio en medio del follaje
De una embriaguez en la Chiquitanía, casi al borde del averno
La llegada a Concepción desafiando el organismo
Especialmente las vísceras y el hígado
Y de perder la casta y el báculo de pastor de los hebreos.
Me alejaba del edén por una orilla y los templos
Demasía de floresta, exuberancia de belleza y acabado,
Como estaba, zanjar el sacrilegio en la quinta Kolping
Ella en su insistencia de mirar mis pasos, cuidadosa
Una boa se acercó nadando a la orilla
Sin detenerse, escudriñándonos desde el agua quieta,
Desde el verdor de la laguna, reparando en mi achaque
De animal bípedo abatido
Y tal vez también Baco, oculto entre los rotundos toborochis
A la espera de un convite
Truenos estrepitosos retumbaron para apuntar en la bitácora de viajes
Y de allí la lluvia de gotas tropicales
Caprichosa y resuelta
Chorreaban los bambúes herbáceos en el aguacero.
Las enredaderas serpenteadas en la fecundidad de la espesura
Era humanidad y diluvio.
Y yo allí con ella con mi destemplanza biológica
Olor impetuoso a tierra húmeda a pubis en la presteza de la vida,
En cuanto a ella y la selva
Éxtasis en el transitorio desvarío,
Después el remanso la plenitud del paraíso.
Siempre hay brevedad en el deleite, fugacidad en la mímica del goce
incluso
ebrio en medio del follaje.